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De nuestro campo a más de 30 destinos en todo el mundo

De años a días, así ocurre la magia detrás del aguacate Hass que se produce en más de 16 departamentos de Colombia y llegan a los estantes de los supermercados de Europa y los Estados Unidos, principalmente.

Ricardo Uribe, desde la finca La Toscana, nos guía en la Ruta el Aguacate de Pórticolive. Dice: “no todo comienza por la producción del arbolito, como este que ustedes ven, sino de la producción de la semilla, de la yema”.

Hay dos sistemas de propagación: el convencional y el clonal. Está demostrado que el segundo tiene mejores rendimientos y efectividad en labores de poda, aplicación de fertilizantes, de estándares fitosanitarios y recolección. Esto también permite conservar la variedad, en este caso, el Hass. Es por esa razón que Uribe asegura que el futuro está ahí.

Si es un proceso convencional entre 4 y 6 meses y en un clonal 13 a 14 meses, durante este tiempo los árboles están en el vivero. Solo hasta dos años y medio o tres empiezan a producir y llegan a su punto máximo en el año sexto con una vida esperada de 15 a 20 años.

Cuando ya están en etapa productiva, hay dos cosechas importantes de la fruta. El periodo de septiembre a marzo es la cosecha principal, que representa el 70% de la producción total; mientras que desde abril y hasta agosto está “La Traviesa”.  Este es un periodo en el cual Colombia sigue produciendo gracias a sus pisos térmicos y constituye una oportunidad para los productores.

Este es el periodo más retador: “la fruta es más delicada en postcosecha y tiene una vida en anaquel más corta. De otro lado, es cuando Perú está en plena cosecha, entonces pone mucha presión en el mercado, en el caso de Europa. Pero en Estados Unidos hay condiciones mejores”, indicó Uribe.

Cuando el fruto está listo y es cortado de los árboles, embarca rumbo a la planta de empaque 24 horas después. Se empaca en cajas y en una semana, por tarde, debería estar en el puerto. “El Puerto de Cartagena es nuestro aliado”, dice el CEO de Cartama.

Si van para Estados Unidos, los aguacates viajan entre 6 y 7 días, mientras que, si el destino es Europa, los contenedores cruzan los mares por 13 o 15 días. Una vez pisan tierra firme, los aguacates deben estar listos para su consumo, con una vida en anaquel hasta por una semana más.

En esta segunda entrega de La Ruta del Aguacate, Ricardo Uribe nos explica cómo los aguacates colombianos pasan esta “prueba de fuego”. Ver parte 1.